Si echamos un vistazo a los lineales de los supermercados, podría darnos la impresión de que, por ejemplo, casi todos los envases son 100% reciclables, cuando en realidad, el 100% es prácticamente inalcanzable. Las marcas que utilizan estos mensajes ¿tienen un respaldo para tan contundente comunicación? ¿están afirmando que las tintas y adhesivos de su envase también se reciclan? Porque el 100% implica eso, que todo lo que compone un envase es 100% reciclable. El consumidor se encuentra inmerso en tal tsunami de información, o tal vez deberíamos decir desinformación, que ha perdido la confianza en las empresas. Y es lógico. A menudo parece que están más preocupadas en aparentar que son 100% sostenibles que en ser sostenibles de verdad. Deberían ser inadmisibles mensajes como “botella 100% reciclable y de material 100% reciclado” (cuando el envase no es sólo la botella), “cartón 100% reciclable” (cuando no es sólo cartón) o “envase 100% reciclable” (cuando ese envase en la práctica no se recicla).
Lee la entrevista completa en la página 36 del número 115 de la revista Recupera